Decíamos ayer...
Utilizo esta frase de Fray Luis de León para sintetizar mi propio proceso cofrade. Hace cuatro años que salí por última vez de nazareno en mi hermandad, vistiendo esa túnica blanca de merino, antifaz de terciopelo verde y cíngulo de hilos dorados. He estado unos años en barbecho, entre otras razones porque no me apetecía darme una caminata nocturna sin ton ni son.
Pero la Macarena crea mono. Y el año pasado se me saltaron las lágrimas cuando la vi pasar en la Resolana camino de una Sevilla que se vuelca con ella. Si me paro a buscar mis razones para salir, seguro que no las encuentro. No creo en la expiación de los pecados, ni en la penitencia, ni me puede la tradición... creo que ni siquiera creo en Dios y, desde luego, tengo la seguridad personal de que no existe el Dios que promueven quienes respaldan ideológicamente a la hermandad. Osea...
Sin embargo, hay cosas que se llevan en las entrañas, y ya está. La Macarena es una abuela que me contaba historias de la Virgen cuando yo era un párvulo indómito. Es la Virgen del barrio, un recuerdo alegre de la infancia, otro horrible de la adolescencia, una cervecita en la Gavidia con la gente del instituto el día que se conmemoró su coronación. Es un puñado de lágrimas, un post muy sentido, la emoción contenida, el whiski de David al amanecer del Viernes Santo. Es tambien azahar, un deseo, la oración de un joven que entonces tenía fe.
Es la boda de mi hermano, el aplauso de la gente, una visita a Sonia vestido de nazareno, un recuerdo en el extranjero. Es mi perra mordiendo los borlones de mi flamante túnica, las fotos con mi hermana muerto de sueño, una estampa que le regalé a Juan Pedro, la sonrisa de aquel niño, el olor de los claveles. Y es la parada de una madre que, camino del mercado, aprovecha su iglesia para descansar al fresquito.
Son demasiadas las cosas que me unen a Ella como para dejarse llevar por la fe. O mejor dicho, por la ausencia de fe. Decía Muñoz Seca que los sevillanos somos paisanos de Dios, porque su madre vive con nosotros. Yo doy un paso más: Dios existirá o no, eso es cosa suya. Pero la Macarena es su madre. Algún día, la ciencia se pronunciará al respecto ;-)
Es curioso. Qué nítidas se ven las cosas cuando somos pequeños, y luego crecemos y descubrimos un universo de tonos grises. Yo mismo me habría tachado de incoherente hace una década, y esta tarde voy a comprar caramelos y estampitas para repartirlas entre los niños, de acuerdo con la tradición. Si es que... no hay nada que resista el paso de los años.
26 Comentarios:
imagino que hasta que no esté allí o no viva en directo lo que cuentas no llegaré a entender estas cosas... ya se lo dije a enis... me tenéis que contar mucho cuando vaya...
que tengas una semana a la altura de tu grandeza.
besos...
Por Unknown, a las 9:24 p. m.
gracias por acercarnos, por explicarnos un poco mejor la semana santa sevillana. a los que sólo la vemos por televisión nos parece un poco surrealista, y no llegamos a comprenderla del todo.
un abrazo.
Por senses and nonsenses, a las 9:29 p. m.
Chiquillo, los pelos como escarpias, se de la rivalidad, pero yo vi la semana santa desde el lado de la Trianera, y esa saeta en el Altozano, y pasar el puente de Triana, Impresionante, no podría explicarlo, tampoco soy creyente, pero recomiendo que todo el mundo conozca Sevilla en semana santa.
Disfruta.
www/lacoctelera.com/juanangelmv
Por Anónimo, a las 9:41 p. m.
Me da mucha alegría que vuelvas a vestir tu habito nazareno,sabía que no te podrías resistir, el verla y no salir a su vera.
Yo me tendré que resignar a estar con mi princesita y ver a la reina de Sevilla por la T.V., que ya me gustaría verla por Sor Angela con los canticos de las monjitas o por san Juan de la Palma, Feria,Relator, petalada en Parra,
Escoberos,Fray Luis Sotelo, Resolana y por fin, cuando cruce el arco, morena de la candelería y del reflejo del sol, pase al atrio y de forma coqueta, se despida de la ciudad y se vaya para dentro, hasta el año que viene Dios Mediante, cuando ya espero, ansiosamente, que mi princesita tenga un año y pueda enseñarle e inculcarle la Fe y tradición de ver a mis dos reinas por excelencias: La Señora de San Julián y la Reina de Sevilla: ¡Esperanza Macarena¡
Besos y buena estación de penitencia.
Por Anónimo, a las 11:26 p. m.
Ya nos relatarás que sentiste esta vez, si fueron tantas la vez pasada no creo que está se quede corta.Lo verás con más años y quizá.s desde otro ángulo como dices
Por Gema, a las 12:03 a. m.
Sublime, me ha encantado tu post, de verdad. Me has hecho reflexionar cómo vivo yo mi Semana Santa desde Córdoba -mi ciudad natal- y me doy cuenta que me siento tremendamente identificado con lo que cuentas. Mi vida en Madrid me aleja de este tinglado...pero realmente la semana santa se puede decir que se lleva por dentro...
Para mi, semana santa era el bocadillo que tomaba cuando a las tres de la mañana del miércoles santo mi hermandad se encerraba y yo me quitaba los guantes llenos de cera...o cuando hacía lo propio años más tarde el martes santo en otra hermandad...curiosos recuerdos...
Hoy, sin embargo, al menos este año, no me importa no ver todas las hermandades...ni tampoco me importaría no estar aquí...es curioso... bss y abrazos
Por Javier Sánchez, a las 12:17 a. m.
Muy sentido, si señor. Me encanta que digas orgulloso tus motivaciones cofrades tan sinceramente, que no es menos que tus vivencias y recuerdos. Eso vale más que todos los santos juntos.
Besotes!
Por Anónimo, a las 12:30 a. m.
Senses, y Ekiots... es que sacada de contexto Es surrealista. Incluso si vas allí y la vives en directo es muy posible que te siga pareciendo surrealista. Para entenderla hay que ser de allí o al menso haber vivido allí. Para sentirla, creo que ni siquiera eso. Son muchas las personas que, siendo no creyentes, ateos confesos, agnósticos... se sienten fascinados por el espectáculo estético global que supone la Semana Santa sevillana. Porque algo tiene, no lo dudes, no sé muy bien qué es, pero algo tiene. Yo, no tengo las razones familiares ni personales para sentirme vinculado a ella porque realmente mi familia no es de Sevilla y yo no he estado metido nunca en la semana santa, sino como espectador... Aún así, confieso que siemrpe me ha fascinado, y la verdad, teniendo en cuenta todas las razones que existen para que no fuera así (muchas y de paso) lo cierto es que me atrae, algo me atrae... Difícil de explicar, niños.
Carlitos.... Ay, esa Macarena por la calle Cuna, por la calle Parras... GUAPA!
Por Vulcano Lover, a las 10:36 a. m.
Niño ¡no se vale! ¡por qué coño tenéis que escribir todos tan bien!!!!!!!!, ¡me cago en Dios! (sorry, que está esto muy religioso, pero no podía evitarlo xddd)que luego uno no sabe qué coño poner (por qué digo tantos tacos en un post tan ferviente, supongo que son los efectos del gyn lemon xddd).
Hay tradiciones que se mantienen con el paso del tiempo, que forman parte de nosotros mismos, que conforman nuestra vida, a lo mejor con el tiempo dejan de tener su propósito inicial pero se han convertido en algo imprescindible en nuestras vidas.
Lo importante no es la tradición en sí, sino los momentos que has compartido con otras personas asociados a esas tradiciones.
Que lindo!!!!!!!, si te viera te cantaría una saeta!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Nos vemos en el bar cibernético!!!!!!!!!!
Por salva, a las 11:44 a. m.
AYYY MI CARLIIIIII!!! PA COMERTE. NO SE PUEDE SER MAS TIERNO Y NO SE PUEDE EXPLICAR MEJOR ALGO QUE ES TAN DIFICIL DE ENTENDER. ENTRONCES SALES?PÙES PRIMO ROBER, ALF Y YO IREMOS A VERTE. SABES EN QUE TRAMO VAS?MANDAME UN CORREITO. TE QUIERO,ENTRAÑABLE CARLIIII
Por Anónimo, a las 12:05 p. m.
que guapa es la macarena cohones!!!!
besos charly.
pdt:tenemos bloggers en comun!
besos xa mi naranja sevillana favorita.
muuuuuuuuaka!
Por Anónimo, a las 12:26 p. m.
Hay cosas que emocionan y a veces sin saber por qué. La Semana Santa, las procesiones del pueblo de mis padres, que son las que más he visto, emocionan por todas sus calles y callejas y aunque no quieras, algo se mueve por dentro. Lo que no me gusta tanto son las aglomeraciones que se forman en los sitios tradionales, por ejemplo Sevilla ¿verdad?
Disfruta, vívelo y emociónate. Besos
Por Anónimo, a las 1:46 p. m.
Servidor, agnóstico de nacimiento y vocación, también ha aprendido a emocionarse con la vertiente artística, que no con la religiosa. Le tengo un poco de tirria a Iñaki Gabilondo, pero le tomo prestada una frase: "No sé si la Macarena será la madre de Dios, pero desde luego no es un maniquí de El Corte Inglés".
Dicho lo cual, reafirmo mi creencia en que lo más hermoso de la Semana Santa es que reponen Ben-Hur y Espertaco (para los no iniciados, el histórico Craso que da nombre a mi nick, patricio romano, es el tirano que sale victorioso). Ayyy, bendito cine...
Por Craso, a las 4:51 p. m.
Yo de mayor quiero SABER cómo crea la MaCArenA tanto FERVor entrE LOS SeviLLIstas.. NI Betis NI SEVilla, lo que vaLE ES lA MACarena...
Por pijomad, a las 8:50 p. m.
Ay Carlitos que me vas a contar. Que nos vamos a contar. A ver si quedamos y compartimos charlas y experiencias sobre ello. Y cuando vengan los vasquitos a ver como nos la arreglamopara no solo darles a conocer sino intentar hacerles sentir...
Este año Pcj y su family me han arrastrado hacia la otra orilla, pues su fervor se va con la Esperanza de Triana, menos mal que su amiga Mamen y yo hicimos causa común.
Lo cierto es que me ha encantado, e incluso emocionado, pero confieso que la emoción contenida ante la Macarena o el Gran Poder, que este año no vi tan de cerca, me dio aún mas fuerzas de las que podía imaginar, para enfrentarme a mis dudas y mis miedos.
No se que tiene Ella, solo se que Ella me tiene.
Por Anónimo, a las 2:28 a. m.
aveces relatas tan bien(como ahora)...que es como si viaja de centro america a europa, en pocos segundos,,
Por Bohemio, a las 7:02 a. m.
Hola Carlitos!!
Aprovecho para pasarme por aqui, leerte y no puedo dejar de sentir envidia. Son muchos años ya los que me hago el propósito de ir en Semana Santa a Sevilla, y este es otro año más de esos ke me pasa por delante de las narices y me quedo con las ganas, pero estoy segura que para un momento tan ansiado el destino me guarda una sorpresa, el caso es, como siempre ver las cosas de forma positiva.
Un placer este paseo entre tus letritas,
Un besazo!! Sonybabe.
KiSS!!
Por The UNLIMITED EDITION, a las 11:29 p. m.
Ay Carliños, como te entiendo... yo no creo en nada, pero si que las procesiones producen emoción, auqnue eso de llevar un cíngulo en la cintura... jajaja! que bonita palabra!
La verdad es que me emociona ver los pasos llevados a hombros y si ademas van descalzos, lloro como un gilipollas, aunque no entienda que asunto puede llevar a nadie a desfilar asi, descalzo y que dios puede querer que alguien se destroce los pies... pero bueno!!
Bezos
Por Anónimo, a las 12:10 p. m.
No hay porque estandarizar la fe, cada cual tiene la suya.
Por Medea, a las 12:12 p. m.
ME ENCANTAS SEVILLANO.
Por Anónimo, a las 10:38 a. m.
Debo de ser la atea más ferviente de este país, pero es el post más bonito que ha escrito nunca.
Si eres Sublime es por algo, califa mío.
Por Anónimo, a las 11:06 a. m.
Lo menos importante de aquello que nos hace felices es el por qué.
Un abrazo.
Por Darko, a las 11:51 a. m.
Ya se sabe, “el corazón tiene razones que la razón no entiende”. Ni puñetera falta que hace. A disfrutar y no darle más vueltas. Un beso.
Por mint, a las 8:28 a. m.
nota amenazante xa chema:
cuida mucho a carlitos o me metere en medio..y soy experto en hacerlo.
tienes una joya jeje!!
besos xa los 2
pdt:aunq a lo mejor seria mas divertido montarnoslo los 3 jajaja!
besos parejita
Por Anónimo, a las 10:38 p. m.
qué petardo eres, niño... anda, actualiza ya, que estás perdidísimooooo
Por Vulcano Lover, a las 8:38 a. m.
jaja, Carlitos pq dices lo de la COPE? desde luego me has dado en uno de mis puntos debilessssss! jaajaj NO puedo con FJL
Bezos.
Por Anónimo, a las 1:56 p. m.
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